Permítanme presentarles mi nueva obsesión: la luz de video LED bicolor K&F Concept. La llamo cariñosamente mi "pequeño sol" y déjenme decirles que esta caja compacta tiene un gran impacto. En primer lugar, no dejen que su pequeño tamaño los engañe: esta luz es brillante, realmente brillante. Si bien puede que no se compare con una luz de estudio de tamaño completo, es perfecta para una variedad de usos. Ya sea para entrevistas, iluminación de relleno o incluso como linterna durante cortes de energía, esta pequeña joya lo tiene cubierto. La duración de la batería es impresionante, dura incluso en las tomas más largas sin perder el ritmo. Y la simplicidad de los ajustes cambia las reglas del juego. Con solo dos perillas y un solo botón, cualquiera puede operar esta luz con facilidad. La primera perilla controla la potencia y la selección de modo, mientras que la segunda ajusta la intensidad de la luz. Es intuitiva y fácil de usar, con una pequeña pantalla que proporciona toda la información necesaria sin agotar la batería. En términos de funcionalidad, esta luz es una ganadora. Es versátil, confiable y un placer de usar. Está muy lejos de esos productos sobrevalorados del pasado, como ese infame "cubo" que prometía el mundo y decepcionaba. Créanme, he estado en el mundo de la fotografía y la videografía, y esta pequeña luz supera todas las expectativas. En conclusión, la luz de video LED bicolor K&F Concept es un artículo imprescindible para cualquier fotógrafo o videógrafo. Es compacta, potente y un verdadero punto de inflexión en el mundo de la iluminación portátil. No puedo recomendarla lo suficiente: le doy 5 estrellas.