Uso un trípode de escritorio para muchísimas cosas. Desde crear contenido para sostener mi teleprompter frente a mi webcam o cámara réflex digital, hasta incluso colocarlo en el suelo para sacar fotos desde ángulos muy bajos. El problema es que todos los trípodes que he encontrado para estas cosas son bastante baratos o demasiado ligeros, y termino teniendo que usar cosas para estabilizarlos o me preocupa que se caigan o que la gravedad los tire. De hecho, eso me ha pasado más veces de las que me gustaría admitir con mi teleprompter, y no puedo enfatizar lo suficiente lo mucho que es un fastidio que se caiga a mitad de una sesión. Así que vi este y pensé que parecía un trípode pequeño, muy resistente y de calidad profesional, que resolvería todos mis problemas, y no me equivoqué en absoluto. Es perfecto para todo lo que necesito y me recuerda a mi trípode favorito para todo lo demás, solo que un octavo del tamaño y una cuarta parte del precio. Es lo suficientemente resistente como para aguantar todo lo que le he puesto hasta ahora, lo suficientemente estable como para no verlo tambalearse ni inclinarse, y lo suficientemente compacto como para guardarlo en mi escritorio sin que moleste o en el bolsillo lateral de mi bolso de cámara. Me estoy volviendo un gran fan de K&F y con productos como este, creo que se convertirán en una parte integral de mi equipo diario. Lo recomiendo encarecidamente a quienes necesiten un mini trípode por cualquier motivo. No se arrepentirán.