Me quedé atónito al quitar la tapa, ya que, sinceramente, no podía ver el cristal del filtro. Por mucho que inclinara y girara el anillo exterior, el cristal no reflejaba nada. No fue hasta que volví a colocar la tapa, antes de enroscar el filtro en el objetivo, que la superficie interior de la tapa reflejó una luz directamente sobre él, lo que me permitió ver el cristal interior. Instalé el filtro en un objetivo Nikon estándar de 50 mm y, dejando de lado la cuestión de si usar este tipo de filtro UV para proteger el objetivo, no he notado distorsión ni proyección de luz en las fotos. Como el filtro tiene una rosca exterior de 52 mm, puedes apilar filtros encima. El único problema que tuve fue con la tapa magnética, que, de hecho, fue la razón principal por la que pedí el filtro y que imagino es su principal atractivo para esta línea de filtros. El problema radica en quitar la tapa del filtro: como las ranuras del borde exterior de la tapa son horizontales al plano del objetivo, no hay forma de sujetarla fácilmente y quitarla. K&F debería haber usado estrías horizontales elevadas que facilitarían el agarre y la extracción de la tapa. Después de un tiempo, introducir la uña en la pequeña ranura entre el objetivo y la tapa se vuelve cansado y lleva más tiempo de uso que con las pestañas de presión estándar. Por otro lado, la tapa se ajusta al filtro de forma rápida y segura. He intentado mostrar estos dos factores en el breve vídeo adjunto. Salvo el problema mencionado con la tapa, esta línea de filtros K&F con tapas magnéticas es una excelente opción para su fotografía, y la línea K&F Concept es reconocida con frecuencia como un producto de alta calidad. Le doy a este filtro K&F Concept con tapa magnética una sólida calificación de 5 estrellas.