Los filtros de difusión son una excelente herramienta para suavizar la piel y realzar las altas luces. Minimizan el efecto de "vídeo digital" y ofrecen una calidad "cinematográfica" (perdón, tengo que usar ese término) a imágenes que de otro modo serían demasiado nítidas. A diferencia del viejo y engorroso truco de untar grasa en una lente transparente, los filtros de niebla retienen los detalles a la vez que los suavizan. Parece contradictorio, pero una vez que lo pruebes, entenderás a qué me refiero. El efecto puede ser espectacular con iluminación de alto contraste y luces prácticas (visibles en el encuadre). El efecto es menos visible con iluminación plana, pero sigue siendo efectivo. A diferencia de los filtros de densidad neutra, los filtros de difusión de niebla negra no suelen dejar una dominante de color. Según mis pruebas, los filtros K&F Concept son neutros y funcionan muy bien, especialmente por su precio. El de 1/8 es bastante sutil y retiene bien los detalles. El de 1/4 es más intenso y probablemente el que probaría primero, pero oscurece algunos detalles finos. Ten en cuenta que la difusión tiende a ser más pronunciada al disparar con una lente más larga o una apertura pequeña. Por lo tanto, siempre es necesario realizar pruebas y contar con un buen monitor. Estos filtros tienen un buen agarre en el anillo exterior, lo que facilita su instalación y extracción. Se enroscan en la parte frontal por si decides apilar otros filtros. También se envían en un práctico estuche de transporte, aunque yo llevo mi colección de filtros en un organizador grande. Por su precio, estos filtros tienen una excelente relación calidad-precio y vale la pena tenerlos en el kit de herramientas de cualquier videógrafo.