Como muchos fotógrafos aficionados, he llegado al punto de comprar más equipo del que cabe en mi bandolera, así que empecé a buscar una mochila fotográfica. Encontré este modelo: una mochila fotográfica que no lo parece, ofrece suficiente espacio para estar preparada para cualquier situación y, sobre todo, es una ventaja para los hombros que llevan carga en un solo lado. Todos los compartimentos se abren y cierran rápidamente mediante cierres magnéticos y cremalleras; los cierres de cinturón son principalmente estéticos, lo que, en mi opinión, resulta muy atractivo. En el interior, la mochila ofrece espacio para una cámara (el recorte es perfecto para mi Nikon D5300 y su objetivo), varios objetivos y pequeños bolsillos que también ofrecen espacio para objetos pequeños como baterías y tarjetas de memoria. La cámara se puede extraer tanto del compartimento lateral como de la trasera; a los huecos de los objetivos solo se puede acceder desde la parte trasera. La parte superior tiene espacio para flashes, pequeños trípodes Gorilla Pod y otros equipos algo más voluminosos. Puedes acoplar un pequeño trípode de viaje en el lateral o simplemente tener a mano una botella de agua. La tapa y otro bolsillo delantero ofrecen espacio adicional si quieres estar preparado para cualquier situación. También incluye un protector de lluvia. ¡Muy recomendable!