El producto se entrega en una caja naranja típica de K&F. En su interior se encuentra la bolsa de hombro con los binoculares dentro de una bolsa de plástico. La bolsa de transporte es muy cómoda, pero lamentablemente no ofrece suficiente protección contra impactos debido a su finura. Sin embargo, el interior está forrado con materiales suaves para evitar que las lentes se rayen si se usan sin protección. Dentro de la bolsa se encuentran un paño de limpieza, correas para llevar los binoculares al cuello y, finalmente, además de las instrucciones, un ángulo de 90° que permite fijar los binoculares a un trípode para una visión más estable. Los binoculares se fabrican con métodos tradicionales. En la parte posterior, se encuentra una tapa de lente única con ganchos para sujetarla a la correa de hombro. El exterior de los binoculares está hecho de goma ecológica de alta calidad, no absorbe olores y es antideslizante y absorbe el sudor gracias a su tratamiento superficial. El agarre al sostenerlos en la mano es firme gracias al material y la textura. Los oculares incluyen parasoles de goma, que se pueden quitar girándolos hacia la posición de los ojos. Para personas con problemas oculares, la lente derecha también cuenta con ajuste dióptrico. En la parte frontal, las lentes están protegidas por tapas individuales que, una vez retiradas, permanecen en su lugar justo delante del extremo de los binoculares gracias a una pieza redonda de plástico. En los laterales de la mira telescópica encontramos ganchos para fijar las correas incluidas. Como ya se mencionó, las tapas de los oculares se pueden insertar en las correas. En la parte superior se encuentran las letras de la marca K&F CONCEPT. Acercándose a los oculares, se encuentra el botón que permite ajustar el enfoque de ambos. Al otro lado de este botón hay un tornillo que, al girarlo, permite activar la montura angular para trípode. El tornillo, ya en el soporte, se puede apretar aún más mediante una ranura. Con los binoculares 10x42, son muy luminosos y permiten ver objetos a una distancia fija de aproximadamente 3 metros, que se pueden enfocar gracias al elemento central. Los elementos ópticos son muy buenos; dado el precio, esperaba una calidad ligeramente inferior. Sin embargo, K&F fabrica excelentes productos en el sector fotográfico, como filtros para sistemas sin espejo. No mencioné la certificación IP66. El primer 6 significa máxima protección contra el polvo y las partículas finas que pueden penetrar en los elementos ópticos. El segundo 6 se refiere a la protección contra el agua, que no es completa, pero en caso de un chorro fuerte de agua desde cualquier dirección, los binoculares estarían protegidos con una probabilidad muy baja de penetración. La precisión de enfoque es de casi milímetros, pero lo que no me gustó es que la aberración cromática (los "bordes morados") se acentúa más en ciertos contextos. Sin embargo, esto no significa que haya problemas de visión al usarlos. Considerando el costo, es posible que hayan tenido que ahorrar dinero en algunos aspectos.pero eso no significa que siga siendo un gran producto que recomiendo✅