Antes de entrar en detalles, quisiera mencionar que esta mochila es rígida, lo que significa que la parte exterior es dura. No es tan dura como el policarbonato, que también está disponible, sino más bien un tipo de espuma muy rígida. Este tipo de mochilas se odian o se aman. Personalmente, me gustan mucho y tengo una mochila de este formato, que no es para fotografía, y me encanta, pero hay opiniones encontradas al respecto. Como digo, me gustan porque me dan la sensación de que todo está más protegido y siempre tienen el mismo tamaño, así que es fácil encontrarle sitio una vez que la tienes bajo control. Sin embargo, si llevas pocas cosas, sigue ocupando el mismo espacio. El espacio es, sin duda, uno de los puntos fuertes de esta mochila. Su diseño rectangular aprovecha bien el espacio y te permite guardar todo lo que tienes e incluso algunos extras. Los separadores internos son muy funcionales y te permiten organizar todo de forma eficiente. En cuanto a la comodidad, se ajusta bien a la espalda y es cómoda de llevar incluso con mucha carga gracias a su buen equilibrio. El asa de transporte es cómoda y práctica, y la correa de pecho ayuda a distribuir el peso. También incluye una funda impermeable, aunque por suerte aún no la he tenido que usar. El espacio para un portátil de hasta 16 pulgadas también es interesante, pero no rompedor. El acolchado y las zonas de protección en el interior son correctas, sobre todo en los laterales, aunque la parte rígida de la mochila me dejó un poco así, porque esperaba que tuviera algo más de grosor o una pequeña capa adicional de acolchado en el interior, y no es así. De todas formas, para que algo se dañe, el impacto tendría que ser realmente fuerte y posiblemente ningún acolchado lo aguantaría. Las cremalleras son correctas, pero tras haber usado otras mochilas, me da la sensación de que son algo duras. En resumen, es una mochila espaciosa, cómoda y con buenas ideas, pero con algunos detalles mejorables, como la protección del hardshell y las cremalleras.