Esta cosa es como una navaja suiza. Se invierte y se pliega hasta unos modestos 48 cm y pesa solo 1,8 kg, pero puede convertirse en casi cualquier cosa... ¿Un monópode de 1,93 m? Claro. ¿Un trípode de pie? ¡Claro! ¿Patas de ángulo bajo superresistentes? ¡Adiós! ¿Invertido con una columna invertida que deja la cámara a un pelo del suelo? Lo tienes cubierto. ¿Tomar fotos directamente hacia abajo para un libro o una descomposición? La columna central se desliza hacia arriba y luego hacia abajo. ¿Quieres un cabezal diferente, además de los cabezales normales de 9,5 mm? El tornillo del cabezal es reversible, así que puedes conectar la cámara directamente o usar algún accesorio de iluminación inusual de 6,35 mm. ¿Hace mucho viento y necesitas más peso? El gancho de resorte integrado facilita añadir peso adicional a la base. ¿Necesitas una placa adicional o prefieres usar soportes en L para cámara? El cabezal usa placas estilo Arca-Swiss, así que encontrar repuestos o soportes compatibles es fácil. En serio, si compras tu primer trípode (o el segundo después del barato de plástico/aluminio que venía con la cámara), no te equivocarás con este... sea cual sea tu destino fotográfico, este te ayudará a conseguirlo. ¿Tiene alguna desventaja? Claro que la fotografía se basa en concesiones. Si bien tiene peso más que suficiente para cualquier cámara sin espejo y la mayoría de las DSLR, quizás quieras algo más robusto, pero menos versátil, si trabajas con video o usas lentes muy pesados. Las patas del trípode son buenas patas de goma multiusos, pero no tienen púas, que podrían ser necesarias para lugares rocosos o arenosos. Si no necesitas todas las funciones, montar un trípode más sencillo puede ser más rápido que uno que lo haga todo. Además, es un buen equipo de gama media, así que con el uso intensivo, las abrazaderas, los resortes y los clips se desgastarán, pero considerando el valor que ofrece hasta ese momento, vale totalmente la pena.