Como Poner Filtros En Un Video?
Los filtros de video son herramientas mágicas que transforman escenas cotidianas en experiencias visuales fascinantes. ¿Qué sería hoy de plataformas como Instagram, TikTok o incluso YouTube sin esos pequeños ajustes que hacen que todo se vea más cinematográfico o más modernamente nostálgico? Si has llegado hasta aquí buscando dominar el mundo de los filtros en los videos, hoy es tu día de suerte. Vamos a desplegar aquí un arsenal de conocimiento práctico y un par de bromas con la esperanza de que 1) aprendas algo nuevo; y 2) no te aburras.
La Ciencia de los Filtros: ¿Qué son y para Qué Sirven?

Antes de meternos en el barro técnico, hagamos una pequeña pausa para definir qué es un filtro en el contexto de edición de video. En términos simples, un filtro es un efecto que modifica características visuales de un video, como el color, la saturación, el contraste e incluso la nitidez. Por ejemplo, un filtro puede hacer que un video se vea más vintage, simule haber sido grabado en los años 90, o darle un aire futurista con luces neón al más puro estilo "Blade Runner". Son como lentes invisibles que alteran nuestra percepción del contenido.
En esencia, los filtros sirven para:
- Dar contexto emocional a una escena.
- Corregir imperfecciones en colores o iluminación.
- Crear una identidad visual acorde a tu mensaje.
Ahora que sabemos qué son, saquemos la artillería pesada: cómo aplicarlos.
Métodos para Aplicar Filtros a un Video: La Guía Definitiva

1. Usando Aplicaciones Básicas para Móviles (Ideal para Principiantes)

Si tu creatividad fluye mientras estás en movimiento y prefieres grabar y editar sin tocar un computador, hay infinitas opciones en el mercado. Algunos ejemplos populares incluyen:
InShot: Ofrece filtros dinámicos y presets para iluminar tus videos o darles un aire más profesional. Tienes opciones tanto gratuitas como premium, y la interfaz es tan intuitiva que podría ser usada por extraterrestres en su primer día en la Tierra.
CapCut: Famosa por su simplicidad. Aquí los filtros no solo son potentes, sino que vienen con ajustes secundarios que permiten personalización detallada. ¿Quieres que tu cielo tome tonos mágicamente alucinantes? CapCut hace eso sin sudar ni una gota.
VN Video Editor: Más orientado a quienes buscan un equilibrio entre potencia y rapidez. VN tiene una gama amplia de filtros cinematográficos que sorprenderán a cualquiera.
Para usar estos filtros, normalmente solo necesitas:
- Cargar tu video en la aplicación.
- Navegar hacia la sección de filtros o "effects".
- Seleccionar y ajustar la intensidad del filtro hasta que el resultado te haga pensar: “¿Me convertí en Scorsese por accidente?”.
2. Software Profesional de Edición (Ideal para quienes buscan control total)

Si lo tuyo es tomarte en serio la postproducción y convertir tus videos en una obra digna de festivales internacionales, aquí es donde brillan programas como Adobe Premiere Pro, Final Cut Pro o DaVinci Resolve.
Adobe Premiere Pro: Es el estándar de la industria cuando hablamos de edición profesional. No solo tiene filtros preestablecidos (conocidos como LUTs), sino que puedes crear los tuyos desde cero para ajustarlos milimétricamente a tu proyecto.
- ¿Cómo aplicar filtros en Premiere? Sencillo: dirigirte al panel de “Color Lumetri,” que es prácticamente la puerta de entrada a todo un universo de ajustes visuales. Cargar un LUT predefinido puede tardar menos de 10 segundos.
DaVinci Resolve: Aunque se le conoce por ser impresionante en corrección de color, su abanico de filtros no se queda corto. Aquí no solo aplicas filtros; personalizas cada aspecto técnico como un loco científico delante de un experimento. Desde imitar películas de 35 mm hasta emular videos musicales de los 80.
Final Cut Pro: Los filtros de este programa casi te susurran al oído: “Soy profesional, pero intuitivo”. Ideal para editores de macOS que valoran tanto el estilo como la velocidad.
Los pasos básicos para software profesional son similares:
1. Importa tu video.
2. Aplica ajustes predefinidos (LUTs o filtros básicos).
3. Ajusta manualmente las curvas de color, contraste y otros detalles técnicos.
3. Usando Herramientas Online
Si lo único que tienes ahora es un navegador web, la tecnología todavía está de tu lado. Plataformas como Canva, Kapwing o incluso Clipchamp permiten aplicar filtros rápidos en tu video sin necesidad de descargar programas pesados.
- Subes tu video.
- Seleccionas una plantilla de filtros.
- Ajustas proporciones, colores y exportas tu obra. Voilà.
¿Es perfecto para fanáticos del minimalismo o para personas que no desean instalar más aplicaciones en su smartphone? Absolutamente.
Las Claves para Elegir el Filtro Correcto
Hay un pequeño "arte oculto" en decidir qué filtro usar, y aquí va un consejo práctico. La elección de filtros debería basarse en:
1. La naturaleza de tu contenido: Si estás mostrando paisajes, un filtro que ajuste la saturación podría ayudarte a destacar los tonos vivos. Para videos de eventos más íntimos, los filtros de tonos cálidos crean mayor cercanía emocional.
2. La plataforma donde lo publicarás: En Instagram, por ejemplo, los tonos vibrantes dominan. Pero si estás en TikTok, los estilos vintage o humorísticos suelen ser más populares.
3. La coherencia visual: Si estás creando una serie o un proyecto de marca, es esencial mantener un estilo cohesivo. No puedes tener un video con filtros pastel y otro con tonos lúgubres sin que tus espectadores se pregunten: “¿Estamos viendo episodios del mismo programa?”.
Los Errores Comunes al Usar Filtros (Y Cómo Evitarlos)
Para cerrar el tema, desmitifiquemos algunos errores:
Exceso de filtro: Si tus colores parecen sacados de un cómic psicodélico, probablemente hayas pasado la línea de los ajustes sutiles. Menos es más, amigo.
Ignorar el balance de blancos: Puedes tener el mejor filtro del mundo, pero si tu video empieza con una iluminación desastrosa, será inútil. Haz un ajuste básico antes de aplicar cualquier efecto.
Añadir filtros a tus videos no es solo una cuestión técnica; es un compromiso personal con la estética y la narrativa. Con cada filtro que elijas estás comunicando algo más allá del contenido bruto. Así que la próxima vez que estés en medio de esa edición nocturna donde el café parece insuficiente, recuerda: dominar los filtros es sólo el principio. ¡Haz que el mundo vea las cosas desde tu perspectiva única! Ahora, sal allá afuera (o quédese en casa, más cómodo) y transforma tus videos en auténticas joyas visuales.